lunes, febrero 04, 2002

Estoy obligado a decir que tan fácil es para mí caer,
estando solo no me importa caer, siempre me he podído
levantar.

¿Quien me imagína volar? Alguien para variar lejana,
alguien que me invíta a viajar.

...pero ¿que tanto puedo decír? Principios de demencia,
señales de la inspiración que me rodea y aún así me
pregunta si pienso en ella, si me daría un segundo le daría
la respuesta perfecta, si no simplemente le diría que sí.

... deseos simples, a veces deseo solamente que un día
me despiertes.

Me acarrea la espontaneidad compartiendo los gustos
que expresamos, no hay nada ni tanto que decir más
que te quiero ver.

Ella me espera volar, alguien para variar lejana, tal vez
allá la vea aquí enseguída.

... pero ¿que tanto puedo decir? Me alcanza mi demencia
y me arrastra a al ya conocída presencia de mi favoríta
compañera, aquella que me espera paciente en mi recámara,
que siempre me acompaña, mi maldíta soledad.

...deseos simples, a veces creo que tu presencia espanta
esa soledad.