martes, abril 20, 2004

Acabo del llegar y aún no tengo nada que decir,
ayer caminé para inspirarme pero no encontré nada de tí

Atravesando calles, ciudades y todos los edificios ignorados
y otros derrumbados, donde me han visto distinto y cambiado.

Te busqué las veces que me vi obligado, solamente la mala
respuesta me vió desilusionado frente a lo que me habías
brindado.

Me cambiaste por simple comunidad, decías que
tenías una harmonía que no querías molestar.
Cuando hablabas de aquel extraño juego que jugabas,
me tenías a mi como tu pieza favorita.