Cargamos el peso de una espera,
que nos obliga a apretar el cinturón de nuestro corazón,
para aguantar el hambre de la distancia
y sacar algún provecho de esta separación.

Buscar los puntos intermedios a donde puedas caminar
y yo pueda llegar,
aquellos lugares que llamaremos nuestros
y regresaremos en otra ocasíon.

El mundo gira mientras permanezco parado,
para ver si te veo llegar desde otra dirección,
¿O te podré ver antes si te esperas y te voy a buscar yo?

Te pongo el reto, de venirme a buscar,
yo me dejaré encontrar, me es fácil quedarme en este lugar.